El Superior Tribunal de Justicia, con la presencia del Ministro Mario Vivas, convocó a una amplia reunión en la ciudad de Esquel, a la cual concurrieron la fiscal María Bottini, titular de la Agencia de Delitos contra la Integridad Sexual y Violencia de Género, junto al SAVD, las juezas y funcionarias de los juzgados de Familia, el juez de Lago Puelo, jueces penales, Defensa Pública, Equipo Técnico, Comisaría de la Mujer, Unidad Regional y Comisarios de toda la circunscripción.
Vivas destacó el grado de compromiso con la Violencia de Género que observa en los operadores, luego de escuchar las intervenciones de cada sector, los logros obtenidos en el tiempo, las políticas que funcionan y las dificultades, carencias e inconvenientes por resolver. Su objetivo fue escuchar los aportes de los operadores para llevar adelante las mejoras en el sistema que se consideren necesarias.

El rol del Ministerio Público Fiscal

El protocolo de intervención en casos de violencia familiar, implementado en toda la provincia por el Ministerio Público Fiscal (Instrucción 01/14 PG), fue reconocido fundamentalmente por la Comisaría de la Mujer y por policías del interior, como una herramienta que facilitó la intervención en cada caso. Cinthia Gallegos, a cargo de la Comisaría de la Mujer de Esquel, destacó la disponibilidad permanente de la Fiscalía, a través del fiscal de turno, “nos da seguridad”, sostuvo. También se valoró el trabajo que realiza el Servicio de Asistencia a la Víctima del Delito.

Necesidades

Los juzgados de familia señalaron que muchas de las medidas de protección carecen de sentido si no son acompañadas por políticas públicas decididas. Entre las necesidades se habló de recursos tales como hogares refugio, hogares apropiados para adolescentes y niños, equipos de salud mental especializados en el tratamiento de la violencia familiar, dispositivos electrónicos, entre otros. Todos ellos, recursos que dependen de la decisión de otras instituciones del Estado.
Se habló además, de las limitaciones con las que se encuentran los equipos técnicos, recursos materiales y humanos insuficientes para dar una respuesta adecuada a la alta demanda que atienden.
Muchas instituciones, diferentes fueros, profesionales de distintas áreas, abordan la violencia de género. La violencia que vive una determinada familia puede estar atravesada por intervenciones y decisiones de varias instancias a lo largo de su historia o simultáneamente. Se evidenció la necesidad de continuar ajustando la articulación entre los operadores.