Un proyecto presentado en la Comisión de Energía del Senado de la Nación cuestionó los aumentos en el precio de las naftas y el gasoil al tiempo que reclama explicaciones sobre el accionar de las empresas en el mercado doméstico. Además, pide precisiones sobre el rol de la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia para arbitrar en estos casos. Argentina aparece entre los países con el combustible más caros de la región y del mundo. Expendedores vaticinan nuevos aumentos en los combustibles tras el resultado electoral del domingo. Cada vez tiene menos incidencia los precios diferenciales de la Patagonia.

Subas autorizadas

La Senadora Nacional Sandra Giménez presentó un Proyecto de Comunicación en el que solicita explicaciones acerca del último incremento en el precio de los combustibles. La iniciativa caratulada S-2549/17 exige entre otras cuestiones conocer las variables consideradas y cuál es la ponderación de cada una de ellas en la determinación de los aumentos
La legisladora reclamó además conocer cómo se compone la estructura de costos de la producción, procesamiento y distribución de combustibles en Argentina, cuál es el posicionamiento que tiene cada una de las empresas que participa del mercado de combustibles y el rol de la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia para arbitrar en estos casos.
En ese orden, Giménez cuestionó el lugar que ocupa la Argentina entre los países más caros de la región y del mundo, al tiempo que demandó detalles de la dispersión de precios que se registra en el territorio nacional.

Revisión trimestral de precios

La parlamentaria recordó que el pasado 9 de enero el gobierno del Mauricio Macri firmó un acuerdo con las refinadoras y productoras de combustibles para realizar una revisión trimestral del mercado de combustibles tendiente a ajustar los precios locales al mercado internacional, en función de ecuaciones y variables cuya ponderación y valorización no es pública.
“Es necesario conocer su origen para transparentar el proceso de toma de decisiones que afecta el poder adquisitivo de toda la economía porque el costo del combustible no hace más que retroalimentar el proceso de inflación alta y sostenida en curso”, enfatizó.
“Para transparentar el proceso de la determinación de precios del mercado de combustibles es necesario que se haga pública la estructura de costos de cada etapa y cuál es la ecuación que forma parte del acuerdo firmado entre las empresas y el gobierno a fin de que se pueda analizar la evolución de cada variable y su ponderación en el aumento”, agregó.
Giménez finalmente, ejemplificó su argumentación con lo que sucede en las provincias fronterizas con Brasil y especialmente, Paraguay. “El litro de nafta súper cuesta $19,78 y en Encarnación baja a $15,60. En el caso de la Premium, el valor del litro es de $21,54 y $18, respectivamente. Además, se suma la ventaja de que en la ciudad paraguaya ofrecen nafta común a $9,60 el litro”, puntualizó.

Los precios diferenciales patagónicos

Los combustibles en la Patagonia aumentaron entre 4,26 y 5 pesos en los últimos 19 meses. La cifra resulta engañosa ya que desde diciembre de 2015 la región está incluida en la zona de precios diferenciales para la Patagonia, que cuenta con rebajas de un 22% para naftas y un 12% para gasoil. Sin ese beneficio todos los carburantes líquidos del mercado hubiesen quedado por encima de la inflación acumulada: que fue del 44,76%.
Según datos relevados por la Cámara de Expendedores de Combustibles de Neuquén y Río Negro (Cecnern) los precios por bandera se mantuvieron estables con el correr de los meses. YPF y Axion son las que tienen los valores más bajos del mercado. Le siguen Shell y las estaciones que eran propiedad de Petrobras (actualmente Pampa Energía).
Tomando como referencia los precios de las estaciones de servicio de la petrolera nacional, se puede establecer que el combustible que más aumentó en el periodo analizado fue el gasoil premium: pasó de 12,83 a 17,83 pesos. La suba, de 5 pesos en 19 meses, representó un 39% de incremento. Este carburante se paga en los surtidores de Capital Federal 19,91 pesos.
En la vereda opuesta quedó la nafta súper, el segundo combustible más vendido detrás del gasoil común, que pasó de 10,25 peses en diciembre de 2015 a 14,56 pesos en junio de 2017. Pese a que en términos reales fue el que menos creció (4,31 pesos), en la referencia porcentual fue uno de los que más se disparó: 42%. A diferencia del resto del país, en la región la nafta súper es el combustible más barato desde la inclusión de la zona en los precios diferenciales patagónicos.
La nafta premium también acumula una suba del 42% y pasó de 11,38 pesos a 16,17 pesos por litro. En tanto el gasoil común, el que utilizan las actividades productivas, trepó de 11,45 pesos a 15,91 pesos.

“No van a bajar”

“Los buenos resultados que las elecciones primarias le brindaron al Gobierno de Mauricio Macri servirán de respaldo para profundizar el ajuste que se verá reflejado en un nuevo aumento en los precios de los combustibles”, pronosticó Manuel García, Presidente de la Asociación de Estaciones de Servicio Independientes.
“No van a bajar, no hay motivos para que eso suceda y más aún tras un comicio favorable como fue el de las PASO”, arriesgó el dirigente expendedor.
“Tampoco se retocará el esquema impositivo”, afirmó el empresario. “Mientras haya déficit fiscal, la carga de impuestos que recae sobre las naftas y el gasoil se mantendrá ya que aporta cifras millonarias a las arcas del Estado”, agregó.
Respecto al consumo, el directivo de AESI sostiene que conservará los niveles actuales. “Mejora, es verdad, pero si lo comparamos con lo que sucede con el crecimiento del parque automotor la relación no resulta positiva como parece”, evaluó
En ese sentido García opina que tampoco habrá modificaciones sobre la política adoptada con el GNC: “Nada indica que cambiarán la visión hacia el gas vehicular, mi perspectiva es que a las autoridades no les interesa mantener un combustible barato”.
“La situación para el expendedor de GNC está muy difícil”, alertó. “A mi alrededor ya colgaron las mangueras tres bocas, las ventas cayeron mucho y los costos operativos subieron en forma inversamente proporcional, la mayoría no puede sostenerse en las actuales condiciones”, advirtió.
García vaticinó finalmente que, con este impulso, durante los próximos meses el Gobierno “va a ajustar el cinturón y se va a notar en el poder adquisitivo de la gente”. Al respecto consideró que la retracción impactará en el sector de las Estaciones de Servicio con más cierres y empleados fuera del circuito laboral.

Fuente: Surtidores, Río Negro, Otras