Un grupo de trabajadores de la educación autoconvocados se manifestó, a media mañana del lunes, en la Plaza San Martín, lugar donde expresaron un enérgico repudio al hecho que tuvo lugar, el día anterior, en las inmediaciones del Congreso Nacional.
Allí, docentes pretendían instalar un aula itinerante y, según trascendió horas más tarde, el tránsito no iba a ser interrumpido en dicho sector; sin embargo, bajo dicha premisa, los presentes fueron reprimidos por las fuerzas de seguridad y seis docentes fueron llevados, detenidos, a la Comisaría Sexta de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
El polémico dirigente del gremio de la Educación, Roberto Baradel, sostuvo que la Policía actuó “bajo estrictas órdenes de Presidencia de la Nación”, en virtud de las agresiones sufridas por los educadores, quienes fueron golpeados con palos por los uniformados y a quienes, también, les arrojaron gas pimienta.
El motivo de la instalación de la carpa educativa era, en primer lugar, reclamar por la reapertura de la negociación paritaria nacional y, por otra parte, discutir una nueva Ley de Financiamiento Educativo.
En este contexto, docentes autoconvocados y trabajadores de varios sectores, entre ellos el Hospital Subzonal “Andrés Ísola” de Puerto Madryn, concurrieron a la plaza central, donde distintas personas oficiaron de oradoras, expresando su punto de vista sobre lo sucedido y llamando a reflexionar sobre la actual situación vivida en materia educativa en todo el país, donde la ciudad costera no constituye una excepción.

Se plegaron trabajadores de Salud

“Hoy les tocó a los docentes, pero realmente esta es una política que ha tomado el Gobierno Nacional, y que es totalmente repudiable”, manifestaba una trabajadora del área de Salud, quien fue la primera persona en hablar, a la vez que agregó, dirigiéndose a los docentes: “Queríamos brindarles nuestro apoyo, en el marco de nuestro propio conflicto del sector; al no estar llamados a paritarias, comenzamos con la retención de servicios por dos horas en el Hospital, así que decidimos en asamblea venir a acompañarlos”.
Además, planteó que “el camino, indudablemente, va a ser comenzar a juntarse todos los sectores, porque el camino va a ser complicado, y estas políticas no van a retroceder, sino que se van a seguir profundizando, por lo que vamos a necesitarnos a todos en la calle”.

“Madryn no se arrodilla”

Por otra parte, una docente jubilada criticó enérgicamente la situación vivida por los educadores a instancias del Congreso de la Nación: “Si les va bien a ustedes, chicos, nos va bien a los jubilados; caso contrario, seguimos para atrás”, sostuvo, añadiendo que “no creo que la represión de Macri sea el camino correcto, no creo que con el poder, mostrando la vara, puedan someternos; el docente no se somete y ningún compañero también”.
Sobre esta línea, remarcó que “Madryn no se arrodilla, y si no se arrodilla, estamos todos acá; el tema es que, con el poder de este hombre, que no tiene límites, honestamente me da miedo, por ustedes que son más jóvenes, tienen chicos y demás, yo ya estoy grande” y comentó que “me llamó mucho la atención el pedido de Baradel, que dijo ‘no se desconcentren, no vayan solos’, esa frase me dio mucho miedo, porque acá, en Puerto Madryn, podemos ir solos y nos conocemos, pero en Buenos Aires, donde están poniendo el hombro, están sufriendo el garrotazo, a la vez que los medios hegemónicos nada dicen, incluso algunos justifican todos estos atropellos, que en realidad son represión; enseñemos a nuestros alumnos qué es lo que está pasando”.
Además, criticó a los docentes que no asistieron a la convocatoria y sostuvo: “Hoy (por el lunes) no hay clases, deberíamos ser muchos más acá, es algo que me entristece; que no puedan venir algunos por tener que atender alumnos, no es verdad; si hoy uno no cuida lo suyo, no se sabe quién lo hará, porque detrás vienen los jóvenes, y si no tienen pavimento y camino de lucha, estamos complicados”.

“Se socava la propia democracia”

También, un científico del CCT Cenpat que se encontraba allí presente, dio lectura a un comunicado de la Red Federal de Autoconvocados. “Repudiamos enfáticamente la represión ejercida por la Policía Metropolitana y Federal a los docentes de Ctera que intentaban instalar una escuela itinerante frente al Congreso Nacional”, precisó, agregando que “es inadmisible que la reacción frente a los compañeros que defienden la educación pública, sea la represión; está claro que el Gobierno Nacional no quiere dialogar, sino callar las voces de los y las docentes argentinos, que luchan por su derecho a la paritaria; una vez más, decimos que la protesta es un derecho fundamental, garantizado por nuestra Constitución Nacional, y entendemos que, si el derecho a criticar al poder se acalla, lejos de propiciar el diálogo, se socava la propia democracia”. El documento fue firmado por varias asambleas de autoconvocados del área de Ciencia y Técnica a nivel nacional, entre ellas Agrupación Construcción de Graduados, Facultad de Ciencias Naturales y Museo de la Universidad Nacional de la Plata, Ateneo, Científicos Tucumanos, Científicos y Universitarios Autoconvocados Bariloche, Científicos y Universitarios Autoconvocados Buenos Aires, Científicos y Universitarios Autoconvocados Córdoba, la 12 de Noviembre, Universidad de Mendoza, Ni un Paso Atrás, Científicos y Universitarios Autoconvocados de Entre Ríos, Rosario, Paraná, Santa Fe, Salta, La Rioja, Autoconvocados Patagonia Norte, Frente Universitario Norpatagónico y Trabajadores Autoconvocados del Cenpat Puerto Madryn.

Críticas cruzadas

Luego, una docente de educación primaria brindó su reflexión sobre los hechos y sostuvo que “vengo acá como ciudadana, a defender la democracia, porque los hechos sucedidos el domingo son antidemocráticos; esta marcha de hoy (por el lunes) es la verdadera ‘marcha de la democracia’, no fue la del otro día, con cuatro o cinco personas aplaudiendo nadie sabe qué, sino que esta marcha de hoy es por la democracia”.
En este ámbito, criticó la concurrencia, la cual se esperaba fuera mayor, y sentenció: “Yo hubiera esperado que esta plaza estuviera llena de ciudadanos, porque cuando la represión toca a uno, nos tocan a todos; hoy les toca a los docentes, mañana a los del Hospital, pasado a los empleados de Comercio, la represión es para todos, y se puede negociar con los ‘pibes’ en las aulas, pero con la represión no; por eso, cuidado con lo que hacemos en la ciudad, esta es la verdadera marcha por la democracia, defendámosla”.

“Cada dos o tres días hay protestas”

Uno de los referentes políticos que pudo verse durante la convocatoria fue el concejal Juan Duarte, quien se expresó duramente respecto de lo ocurrido y manifestó su acompañamiento a la convocatoria docente: “Estamos viviendo, desde que asumió este Gobierno Nacional, una escalada alarmante de violencia institucional, la cual nosotros venimos repudiando desde el principio; por supuesto, mientras la protesta social va aumentando, los niveles de represión van aumentando y eso se está notando cada vez más; el presidente Macri y la ministra de Seguridad tienen que entender que, por este camino, lo único que van a lograr es que las protestas se sigan dando”, opinó, agregando que “de hecho, vemos que cada dos o tres días, hay trabajadores en la calle haciendo algún reclamo, en virtud de medidas que el Gobierno ha tomado, y si esas protestas son reprimidas, como lo están haciendo salvajemente en este momento, eso va a generar que, en principio, no solamente los que estamos en contra de las políticas del Gobierno desde el principio, las repudiemos, sino que toda la sociedad argentina se pondrá de pie para defender los derechos que fueron adquiridos”.

La protesta social

Por otro lado, el edil planteó que “la esperanza es que la protesta social cumpla el rol histórico que tiene que cumplir, y esto es que el Gobierno termine modificando el rumbo que está teniendo; me parece que la charla que tiene que tener el mismo con los trabajadores organizados, tiene que ver con esto, con un cambio de rumbo de las medidas económicas, y de no ser así, esto va a terminar en algo muy similar a lo que pasó en el 2001 en Argentina; estas medidas no tienen otro destino, el único que tienen es el de un pueblo descontento, y este tiene todo el derecho del mundo a estar en la calle, pero si este derecho es reprimido, terminamos en un final nefasto, por supuesto”.
Consultado sobre si existe una “condena implícita” a la protesta social, Duarte corrigió que “lo que hay es una necesidad de este Gobierno de condenarla, para poder seguir adelante con las políticas que quiere llevar adelante; esto es deliberado, no hay una condena implícita, sino necesaria, y desde el principio supimos que este modelo económico solamente cierra con violencia en las calles, con protesta social reprimida, no hay otra forma; los trabajadores no pueden aceptar que su derecho social sea vulnerado, que sus salarios estén cada vez peor”.