Los jueces revisores Marcelo Nieto Di Biase y Fabio Monti resolvieron ayer confirmar la decisión que ya había sido adoptada por Sergio Piñeda y por lo tanto, Néstor Fabián Riquelme deberá permanecer en prisión preventiva hasta la audiencia preliminar, imputado por portación ilegal de arma de fuego de uso civil agravada por haber sido condenado en un hecho con utilización de arma de fuego, de acuerdo a la acusación ya presentada por el Ministerio Público Fiscal, representado en esta audiencia por el funcionario de fiscalía Lucas Koltsch.
Por su parte, el defensor Javier Allende argumentó que no estaba fundamentada la necesidad de mantener a su cliente con la medida de coerción, relatando el hecho, e indicando que el 1 de febrero cerca de las 20, la Policía fue alertada por vecinos sobre la presencia de dos personas en el sector B del barrio Constitución, manipulando armas de fuego, escuchándose detonaciones. Arribados los efectivos al lugar encuentran a los sujetos sentados sobre un nicho, y cuando van a efectuar la requisa, uno de ellos intenta huir, cayendo en ese instante un arma de fuego tipo pistola calibre 22 larga con un cartucho en la recámara.
Consideró Allende que no se observa la gravedad del hecho, rechazando la existencia de un posible delito, al no haber un enfrentamiento ni personas directamente afectadas. Expuso que no se percibe un riesgo de fuga y se podía reemplazar la prisión por medidas sustitutivas.
Sin embargo, el doctor Koltsch mantuvo las argumentaciones esgrimidas oportunamente, y mencionó la condena dictada por el doctor Barrios a partir de varios hechos acumulados, uno de ellos un robo a estación de servicio con utilización de arma de fuego, además de varias rebeldías que fueron levantadas solo cuando Riquelme fue aprehendido por otros delitos. Para la fiscalía, lo resuelto por el Juez Piñeda se ajustó a derecho, y solicitó su confirmación, previendo además que la pena en expectativa es de cuatro años y no puede ser de cumplimiento condicional.