En la audiencia de control de detención llevada adelante en sala de oficina judicial, tercer piso de tribunales, el Ministerio Público Fiscal, representado por el fiscal general Fabián Moyano expuso los elementos que se consideran para acreditar la probable autoría de Rubén Darío Castaño, por el delito de homicidio agravado en grado de tentativa tratándose la víctima de funcionario policial, según artículos 80 inciso 8, y 42 del Código Penal, en carácter de autor.
El fiscal relató que el 17 de febrero, cerca de las 16:50 horas, sabiendo lo que hacía y buscando un determinado resultado, conducía su camioneta Ford ranger en búsqueda de la víctima, Javier Acosta Farías, quien fue enjuiciado y absuelto en un proceso por el cual se investigó la muerte de su hijo, Mauro Castaño.
El imputado persiguió al funcionario policial, quien se encontraba de franco y desarmado, y lo alcanzó en la intersección de las calles Morgan y Daleoso, efectuándole dos disparos con arma de fuego desde muy corta distancia, impactando en el cuerpo de Acosta en la zona del tórax, lo que causó heridas graves, para luego darse a la fuga, ocultar el vehículo, y finalmente entregarse, frente a su domicilio, cerca de las 00:30 horas.
A su vez, detalló que personal policial fue alertado de una persona en la vía pública que había sido atacada, y los dos efectivos que llegaron al lugar auxiliaron a la víctima, quien en el traslado al hospital les dijo, antes de desvanecerse, quien lo había atacado, describiendo además el arma utilizada, calibre 22, y el vehículo en que se movilizaba.

“Hacete cargo de tu hija, me voy a entregar”

Por otra parte, el fiscal Moyano consideró la existencia de un plus en el dolo ejercido por Castaño, ya que podría tratarse de un acto de venganza por todo lo sucedido con su hijo, e indicó que, al momento de solicitar procedimientos de allanamiento y detención, encontrándose en la seccional tercera supervisando los preparativos de infantería y GEOP, lo acompañaba el fiscal Marcos Nápoli, contactándose este último con familiares, que facilitaron las gestiones para la detención del imputado.
Darío Castaño llegó al lugar, acompañado por el padre de su concubina, quien manifestó que el agresor fue a su casa expresando: “Hacete cargo de tu hija y la topadora, me la mandé y me voy a entregar”, y solicitándole que lo acompañara para proceder al respecto.
Otro de los elementos traídos a colación por el fiscal, tiene que ver con un escrito publicado en las redes sociales, más precisamente en su cuenta de Facebook, donde recuerda a su hijo Mauro, al cumplirse dos años de su fallecimiento, con una misiva donde entre otras cosa dice: “Voy a salir a arreglar algunas cuentas pendientes que tengo. Nos vemos pronto.”

Orden de allanamiento

Con todos estos datos, algunos de ellos conocidos luego del pedido de allanamiento efectuado a la doctora Moreno, dispuso se proceda a la detención de Castaño, sin perjuicio de encontrar o no el arma utilizado, valiéndose del artículo 217 del Código Procesal Penal, observando que se daban requisitos que pueden fundar los riesgos procesales de fuga y entorpecimiento. Si bien la calificación provisoria es la de homicidio agravado en grado de tentativa por tratarse la víctima de un funcionario policial, la fiscalía ofreció una subsidiaria que sería homicidio agravado por el uso de arma de fuego en grado de tentativa, pidiendo la prisión preventiva hasta la audiencia preliminar, aclarando que podría darse en un término de cuatro meses.

La defensa pidió arresto domiciliario

Por su parte, el defensor particular Matías Cimadevilla recalcó que los restantes policías que habían sido acusados oportunamente por la responsabilidad en la muerte de Mauro Castaño, ocurrida luego de un incendio en el calabozo de contraventores en la seccional primera, recibieron condena en un juicio abreviado, siendo Acosta Farías el único absuelto, tras el juicio correspondiente; pidió el arresto domiciliario de su defendido, resaltando que siempre tuvo la voluntad de entregarse y no cuenta con antecedentes policiales, para exponer además sobre la situación de salud que pesa sobre Castaño, quien padece una grave enfermedad, por la que es tratado mediante sesiones de quimioterapia. A propósito de esto, solicitó que el médico forense evalúe sus condiciones para determinar la posibilidad de quedar alojado en un centro policial. Ante este requerimiento, el fiscal Moyano habló sobre la necesidad de actualizar estudios médicos para llevar adelante una precisa evaluación de su estado.

Riesgos procesales

La Jueza Mirta Moreno en su resolución manifestó que los elementos traídos por la fiscalía a la audiencia acreditan la probable autoría, encontrándose presente el peligro de fuga, debido a las características del hecho, al atentar contra personal policial sabiendo que lo es, y al existir una expectativa de pena que sería de efectivo cumplimiento. Además, el riesgo de entorpecimiento está dado al no haberse encontrado aún el arma que se utilizó.
De este modo, determinó la prisión preventiva por el término de cuatro meses, aunque autorizó la realización de exámenes por parte del cuerpo médico forense, para lo que pidió a la defensa acerque toda documental médica existente para que sea evaluada y se establezca si está en condiciones de permanecer en un establecimiento carcelario. Por lo pronto, exigió se lo mantenga en una celda individual, pero además que sea examinado por el médico policial previo al ingreso a su alojamiento, para luego enviar los resultados de esos exámenes al Ministerio Público Fiscal, la oficina judicial y la propia defensa.
A su vez, señaló la doctora Moreno acerca de esta exigencia, que debía cumplirse con ese requisito en forma estricta, enviando nota al jefe de la Unidad Regional Trelew con dicho requerimiento, bajo apercibimiento de incurrir en delito e incumplimiento de deberes de funcionario público si no se cumpliera.
En principio, Rubén Darío Castaño permanecerá detenido por el término de cuatro meses, aunque deberán llevarse adelante las evaluaciones indicadas respecto a su salud por parte del cuerpo médico forense, que resolverá si está en condiciones de afrontar la situación en un centro de detención policial.