La Cámara Penal de Puerto Madryn, en fallo dividido, rechazó la apelación que habían presentado los abogados de dos de los imputados por la presunta venta ficticia de la empresa Alpesca. Aquella operación de transferencia de acciones tuvo lugar el 6 de enero de 2014, donde Omar Segundo y su hijo Juan Paulo oficiaron de vendedores entregándole el total del paquete accionario a Federico Otero y su madre Rosa Carmen Chico.
La justicia investigó y mantuvo la sospecha que tal venta no fue real, sino una operación simulada, y a entender de los acusadores fue planeada para perjudicar al estado y los acreedores de Alpesca, entre ellos, los casi mil trabajadores que supieron estar bajo relación de dependencia.
El caso tuvo diversas aristas, hasta le significó varios meses de calabozo a la madre de Otero por haber sido declarada en rebeldía, por no presentarse a las diferentes citaciones judiciales, en la que debía ser notificada de la apertura de investigación.
El 21 de junio pasado, la sustanciación del juicio se vio interrumpida a partir del pedido de la defensa de apelar a una ‘probation’, es decir la suspensión de juicio a prueba, donde los imputados ofrecen cumplir determinadas pautas de conducta, y por no pesar sentencias condenatorias firmes, pueden pedir no ser sometidos a juicio, tal como lo prevé el Código Penal.
Ese pedido fue rechazado en primera instancia, pero apelado a una instancia superior. En tanto, esta semana los camaristas madrynenses Flavia Trinchieri, Leonardo Pitcovsky y Rafael Luchelli no hicieron lugar a la apelación de la defensa, por lo que la causa irá a juicio.
Federico Otero y su madre Rosa Chico son patrocinados por el defensor público Gastón Ledesma mientras que Omar Segundo y su hijo Juan Paulo son defendidos por el abogado particular Fabián Gabalachis.
Segundo habría propuesto donar 20 mil pesos a alguna institución benéfica y además ofreció en donación 60 litros de leche durante un año y medio para instituciones de bien público de la localidad. Por su parte, Otero y Chico, donarían 10 mil pesos, más otros 60 litros de leche mensuales, además del compromiso de notificarse una vez por mes en una comisaría de Madryn.
La justicia local busca determinar si las transferencias de los paquetes accionarios de Alpesca S.A. y AP Holding S.A., de Omar Segundo a Federico Otero fueron reales, o si se trató de un ardid para que los acreedores no pudieran cobrar. Lo que en aquel momento era una de las principales pesqueras del país, se vendió, según ese contrato, en apenas cinco millones de pesos, pagaderos en 10 cuotas anuales de quinientos mil pesos.
Al poco transcurrir de la operación, sin estar cancelada en los términos que el mismo contrato fijaba, Otero revendió las acciones a sociedades de Renato Aleua, hasta que este finalmente, se quedó con la totalidad de los cartones.
Por otro lado, el juicio de expropiación quedó totalmente paralizado, ya que la jueza comercial dijo que no avanzaría hasta tanto se defina quién o quiénes son los dueños reales de la compañía. Lo cual podría comenzar a dilucidarse cuando se realice este juicio, aunque para que haya sentencia firme habrá que esperar no menos de tres años.