Este miércoles, al cumplirse el plazo de cuarenta días de prisión preventiva que pesan sobre Dante Donnini, se realizará una nueva audiencia en la que, según trascendió, podrían aparecer nuevas pruebas que refuercen la hipótesis de la Fiscalía y de la querella, que apuntan al chofer como el presunto autor del homicidio de la estudiante, ocurrido a mediados de mayo en una zona aledaña a la Ruta Provincial 1.
Actualmente, la medida que implicó la reclusión del taxista, a partir del fallo del juez Marcelo Orlando y la posterior ratificación de dos magistrados de Sarmiento, respondió a los resultados del informe realizado por el Cenpat-Conicet, que dio cuenta de la presencia de ADN del hombre bajo las uñas de la víctima, en su ropa, cabello y cartera.
En dicho contexto, una de las amigas de Diana Verónica Rojas, que cursaba la carrera de Derecho junto a la joven, sostuvo que “pensamos ir a la audiencia” y adelantó que la familia de la estudiante estaría llegando este martes a la ciudad de Puerto Madryn.

“No quedan muchas dudas”

En relación a la postura de algunos conocidos y compañeros de Diana, algunos de los cuales se habían mostrado escépticos tras la detención del taxista Dante Donnini, la amiga de la víctima sostuvo que, ante las últimas evidencias recolectadas en la investigación “obviamente, con todo lo que pasó, los chicos no tienen muchas dudas”, aunque aclaró que “seguimos sosteniendo lo mismo de siempre, que es la cautela y la responsabilidad que hay que tener para con el caso, porque al final se siguen hablando cosas y realmente no sabemos qué puede pasar el miércoles, durante la audiencia, con las pruebas que se van a presentar, así como tampoco sabemos qué evidencias pueden llegar a aparecer a futuro”.
Consecuentemente, “seguimos acotados y si bien no quedan muchas dudas, nos preservamos”, sostuvo.

“Todos en la familia están destrozados”

Consultada sobre el estado anímico de los familiares de Diana Rojas, con quien mantuvo un fuerte contacto desde que ocurrió el crimen, la amiga de la estudiante relató que “estuve conversando con Adriana, la hermana de Diana y a quien ella era más allegada, y me comentó que la carta que se publicó en las redes sociales, al cumplirse un mes de lo que pasó, la leyeron en una de las radios de Nogoyá (Entre Ríos, de donde la víctima era oriunda), ellos la escucharon y se emocionaron muchísimo”, agregando que “lo único que repite Adriana, porque no le sale decir otra cosa, es que todos en la familia están destrozados”.
La amiga de la estudiante de Derecho asesinada mencionó que “estuve conversando mucho con uno de los cuñados de Diana, que es pareja de una de sus hermanas mayores, que es la persona que tiene más contacto con el abogado de Puerto Madryn (por el querellante Carlos Villada, quien patrocina a la familia de Diana Rojas), porque el resto de la familia está desolada, e incluso el padre, que era una persona muy fuerte, está mal y quebrado” y remarcó que “siempre intentamos hablar con toda la familia de Diana, para alentarlos y darles fuerzas”.

Las claves del homicidio

La estudiante de Derecho fue asesinada de varias puñaladas y le faltaban el celular y la billetera. Las sospechas recayeron en el taxista que la llevó, quien aparentemente no hizo más viajes hasta las 12 de la tarde, estaba rasguñado y había presuntas manchas de sangre en el taxi. Posteriormente, allanaron su domicilio y lo detuvieron.
Por su parte, el médico forense determinó que las lesiones del taxista eran rasguños humanos, compatibles con alguien que se defendió, a la vez que el celular de Diana lo tuvo el taxista y luego se lo vendió a un compañero de trabajo.
Además, en el lugar del hecho se encontró un trapo tipo rejilla, que luego se verificó tenía semen del taxista.
Actualmente, la causa está caratulada como “homicidio en ocasión de robo” pero desde el Ministerio Público Fiscal no descartaron que la misma pudiera cambiar a la figura “femicidio”.