El Consejo Federal Pesquero autorizó una prueba de pesca sin Disela durante la prospección de langostino en aguas nacionales, algo que siempre sucedió pero ahora será legal. Como resultado de las reuniones de Comisión, se decidió el cierre de la pesca de centolla en el área Patagonia Central ya que se estaría en una complicada situación biológica; y en el caso de la reunión de vieira se atendió el reclamo de los empresarios sobre la revisión de la talla comercial. Finalmente se aprobó la impresión de un manual de identificación de mamíferos marinos y se realizaron varias transferencias de cuota de merluza definitivas.
El dispositivo de selectividad para la pesca de langostino, Disela, fue incorporado a las medidas de manejo a fines de los noventa pero nunca se utilizó por oposición de los armadores tangoneros, que siempre sostuvieron que no era efectivo.
Por otra parte informes técnicos del INIDEP han dado cuenta de que ante la abundancia de langostino la presencia de merluza no es significativa, dato que reforzó en su momento la teoría de los armadores. El resultado fue una norma que suspendió su uso y nunca más se volvió a hablar del tema.
Cuando Tomás Gerpe llegó el 10 de diciembre a la Subsecretaría de Pesca de la Nación, dijo que su función se limitaría a ser “la Autoridad de Aplicación” y que como tal estaba “para hacer cumplir las normas”. Rápidamente se encontró con que la norma que obliga el uso de artes selectivas no se estaba cumpliendo en la pesquería de merluza ni en la de langostino.

Prueba simbólica

Esto generó un cimbronazo que sacudió a Mar del Plata y los armadores se opusieron de diversas formas; pero pronto descubrieron que con subir el Dejupa a cubierta alcanzaba para poder salir a pescar y no ser sancionado. Entonces todo volvió a la normalidad y no se volvió a hablar del tema. En el caso del langostino, se hará ahora una prueba simbólica de la pesca sin Disela en la prospección comercial en aguas nacionales que comenzará el 24 de mayo. En realidad se dará visos de legalidad a algo que siempre ocurrió.
“La experiencia indica que, a medida que se avanza en la temporada de pesca de langostino en aguas de jurisdicción nacional, y especialmente hacia finales de la misma, comienza a ser más relevante la captura de especies acompañantes, principalmente la merluza común. Lo indicado se basa en la posibilidad de analizar los efectos reales de mecanismos selectivos y evaluar su utilización en áreas y tiempos acotados, para lo cual se ha previsto reforzar la presencia de observadores a bordo de la flota que opera sobre langostino”, señala el Acta 12.

Sin investigación

El problema es que nadie sabe con qué se van a encontrar en la zona vedada de jurisdicción nacional, donde podría ocurrir que el escenario haya cambiado mucho. Las variables ambientales estuvieron enloquecidas en los últimos años y el INIDEP no pudo monitorear esta situación debido al paro de los tripulantes de sus barcos. Las capturas sin Disela pueden mostrar una alta presencia de juveniles de merluza, ausencia de langostino, abundancia de langostino y ninguna merluza; en cualquier caso los datos que surjan de esa prospección van a ser lo más parecido a una campaña de evaluación en la zona núcleo del Mar Argentino. Para su realización se solicitó mayor presencia de observadores.