Con un panorama desolador se encontró el viernes por la mañana un productor de la zona de chacras de Bryn Gwyn al que delincuentes le carnearon al menos unas cincuenta ovejas, muchas de ellas con corderos por parir.
El productor afectado, de apellido Coria, refirió que se había retirado del establecimiento a las 21 horas de la noche anterior a su domicilio a descansar y cuando llegó a la mañana se encontró con el terrible hecho por el cual su chacra se convirtió en un matadero improvisado. Vísceras desparramadas al lado del corral, las cabezas y los cueros de los animales y una dantesca laguna de sangre daban cuenta del trabajo de varias personas que carnearon los animales para llevarse la carne posteriormente, presumiblemente para la venta.
Según estimó el propio productor afectado, una sola persona no pudo realizar el trabajo ya que se trata de un gran número de animales carneados, al tiempo que analizó que se han movido en varios vehículos para poder trasladar lo que consideró serían unos “mil kilos de carne”. En total por lo sustraído estimó unos 80 mil pesos de pérdida.
Este hecho se suma a otros similares que se dieron en la misma zona de Bryn Gwyn, en la zona conocida como Villa Inés y en Treorcky en los últimos meses.

Viejo reclamo

El reclamo de los productores por seguridad en sus establecimientos se hizo oír hace dos años cuando el robo de animales azotó incontables chacras durante varios meses. En aquel momento se estableció un patrullaje con camionetas que fueron donadas por el Ministerio de Agricultura de Nación y que funcionaban a través de Corfo y en conjunto con la policía local.
Pero además los productores reclamaban puestos de control permanentes en los accesos por las chacras a Gaiman, principalmente en los puentes, para detectar el paso de vehículos que podrían venir de Trelew para cometer estos robos. Si bien los puestos funcionaron identificando el paso de autos de día durante un tiempo, luego los controles se fueron enfriando y de las cámaras comprometidas por el entonces ministro de Seguridad, José Glinsky, no hubo noticias.

Investigaciones y derivaciones

En ese marco cabe recordar que investigaciones posteriores realizadas por la Justicia Federal ligaron el robo de ganados con una causa de tráfico de estupefacientes –denominada Verano Blanco- que terminó con ocho detenidos en el verano del año 2013.
Es que en el Valle la banda operaba robando ganado al por mayor y menor y las viviendas de los chacareros para luego revender los productos en Trelew y con el dinero mandaban a buscar la droga, operación que dio inicio a la investigación de “Verano Blanco”. Cabe destacar que la mayoría de los imputados en esta causa, fueron liberados a las pocas semanas.