En una época en donde se multiplican las fiestas, tanto públicas como privadas, a lo largo de toda la ciudad, el intendente de Puerto Madryn, Ricardo Sastre, anunció que se incrementarán los controles en las noches y en los fines de semana, en todos los aspectos que hagan a la seguridad y convivencia de los vecinos. Además, apuntó que se trata de acciones preventivas que implican la presencia del Estado municipal en cada sector de la ciudad, puesto que las cuadrillas de inspectores, aseguró, recorren habitualmente los distintos barrios madrynenses.

 Tanto whiskerías como peloteros

Así, la Dirección de Inspecciones Municipales y Control Alimentario encara intensos controles durante los fines de semana, especialmente durante la madrugada del sábado y la del domingo. Los sábados, los agentes están abocados al control de whiskerías; allí se fiscaliza al personal de alternancia, quienes tienen que contar con el carnet sanitario vigente al igual que las personas que se desempeñan en la barra, y se hace una constatación en el libro de actas, donde se asienta las observaciones correspondientes.

Según detallaron desde el área municipal, los recorridos abarcan los distintos barrios de la ciudad en los que se controla el cumplimiento de la Ordenanza 3776. La normativa establece la prohibición de vender bebidas alcohólicas a menores de 18 años y en los horarios no permitidos, es decir, desde las 23 hasta las 8 horas del día siguiente.

En relación con esto, se informó que se detectaron locales comerciales que vendían bebidas alcohólicas en horarios no permitidos. En tales casos, se procedió a infraccionar al propietario del comercio y se secuestró la mercadería. Al respecto, la jefa operativa del área de Inspecciones Generales, Verónica Calixto, explicó que “cuando se dan situaciones como estas, se notifica, se hace acta de constatación, donde los inspectores detallan el procedimiento, cantidad de bebidas secuestradas, litros, marca, etc., y se aplica la multa en tanto presunto infractor a la Ordenanza 3776”.

Asimismo, se llevan a cabo controles en los peloteros, dado que se registraron casos de festejos de cumpleaños que finalizan pasadas las dos de la madrugada. Al respecto, se considera que las actividades no son las características de un lugar autorizado para fiestas infantiles.

 Ruidos molestos

Por otra parte, atender las denuncias recibidas a través del 103 es otra de las tareas que atañen a los inspectores municipales. Mediante esa vía de comunicación se receptan llamados por ruidos molestos, fiestas que generan ruidos molestos, venta de bebidas alcohólicas fuera del horario y consumo de alcohol en la vía pública, entre otros aspectos.

En cuanto a este último punto, se hacen recorridas a lo largo de la rambla, sobre todo durante la temporada estival. En tales casos, se procede a la destrucción de la mercadería encontrada.

Cabe mencionar que los inspectores circulan acompañados por efectivos policiales del Comando Radioeléctrico, quienes también están presentes durante las visitas a los boliches, ocasión en la que se controla la presencia de menores y se verifica si la habilitación está vigente así como el rubro para el que fue autorizado. Al momento del cierre de los boliches, a las 6 de la mañana, se fiscaliza que estén desalojados y que sus puertas estén cerradas.

Desde la Dirección de Inspecciones Generales destacaron que, durante el fin de semana, se registraron locales comerciales realizando actividades para la cual no estaban certificados en la correspondiente habilitación municipal. Por ejemplo, puede haber lugares habilitados como restaurante que son explotados como confitería bailable, rubro para el cual los requisitos son notablemente diferentes.