El conflicto entre los trabajadores de la salud y el gobierno provincial, lleva ya más de seis meses, y si bien el disparador de las medidas de fuerza es la cuestión salarial, son muchos los reclamos que llevan adelante los dos sindicatos que representan a profesionales y administrativos del hospital Andrés Ísola de Puerto Madryn. Es por eso que Carla Fredes, delegada de la Unión del Personal Civil de la Nación (UPCN), eligió a El Diario para hacer un repaso de los múltiples problemas que afectan a la salud pública, tanto en la ciudad, como en la provincia.
“La pauta anual para los organismos provinciales en el año 2014 rondó el 33 por ciento, pero salud solo obtuvo un 19 por ciento en nueve reuniones paritarias y dos conciliaciones obligatorias desde agosto a diciembre. Las pretensiones de los trabajadores bajaron a casi un 8 por ciento, quedando prisioneros de estos fracasos los agentes que aún se encuentran a la espera del ingreso al sistema”, explica la delegada gremial. Con respecto al Convenio Colectivo de Trabajo, Fredes señala que todavía quedan puntos sin cumplir: “Fue un gran logro que llevó dos años su confección, pero hoy los artículos correspondientes a ropa de trabajo, guarderías, controles médicos periódicos para el personal, el ingreso de un técnico o licenciado en Seguridad e Higiene para los hospitales cabeceras y la segunda cuota del Arancelamiento, se encuentran sin cumplimento”.

Esperan sentados

La falta de profesionales, sobre todo de enfermeros y médicos para la guardia, es un reclamo que vienen realizando los sindicatos hace ya algún tiempo. Sin embargo, desde UPCN aseguran que hay expedientes esperando por su aprobación: “El ingreso de personal por contrato por horas guardias, como en enfermería y médicos, son recursos indispensables, pero los expedientes duermen en la mesa de algún subsecretario con demoras de hasta casi seis meses. Por ejemplo la incorporación de once nuevos enfermeros, con los expedientes 2902, 4418, 0148 y 4418, y el doctor Néstor Mellado para el ingreso para la guardia, esperan ser llamados. Esto lo he hablado personalmente con el ministro Corchuelo Blasco, quien me respondió textuales palabras que no habrá objeciones por parte del señor gobernador para el ingreso de médicos y enfermeras en cualquier hospital de la provincia”.

Infraestructura

Otro de los inconvenientes que debe enfrentar el hospital Ísola, tiene que ver con los problemas de infraestructura, al que Carla Fredes señala al ex director Administrativo como uno de los responsables: “La inversión y equipamiento de los hospitales son necesarios para brindar más y mejor servicio, y hoy el funcionamiento del hospital se debe en gran parte al arancelamiento hospitalario, recordando que la directora Mónica Villalba y su equipo tomaron el timón de una gestión anterior del contador Claudio Canseco que dejó una deuda tal que ningún proveedor aceptaba seguir trabajando para el hospital sin antes cancelarles la deuda. Además, estamos sin mantenimiento edilicio del nosocomio y no por no contar con personal capacitado, sino por la misma gestión de Canseco, quien no preveía las condiciones de seguridad e higiene, asesorando al ex director Tristán García, que creía en su santa palabra. Sin ir mas lejos, los quirófanos estuvieron cerrados un buen tiempo por falta de cambios de sus filtros”, explica la delegada gremial, quien agrego que “la verdad de esta realidad puede constatarse en el informe de Inspección de Riesgo que realizó personal de la Secretaria de Trabajo local”.

Concursos y convenio

Los concursos para el acceso a los cargos se encuentran en el ojo de la tormenta por la supuesta falta de transparencia, según explica Fredes. El Convenio Colectivo de Trabajo dice que efectivamente se realicen los concursos, pero también provee que la COPICS los reglamente, cosa que esta comisión integrada por representantes de los tres gremios y del Ministerio, solo reglamentó el concurso de Directores Asociados para los hospitales de Rawson, Trelew, Esquel, Comodoro y Puerto Madryn. Esto también significó un logro, si no fuera por la falta de transparencia ya que los mismos se llevan a cabo a puertas cerradas, donde la pata gremial que representa la mesa como veedores. Sin ir mas lejos, el hospital de Comodoro tiene una directora de Servicios Técnicos y Complementarios, la licenciada Candelaria Díaz, que fue la única que se presentó, y por ende gano a un concurso sin reglamentación por la COPICS, sin veedores, y lo que es peor, sin llamado al mismo”. Por último, la delegada de UPCN en el hospital Ísola, se mostró en contra del proyecto de ley para prohibir las huelgas en el sector de la salud: “Es una verdadera insensatez, esto no demuestra más que la gran falencia en los funcionarios, llámese ministros subsecretarios, economistas, y dela incapacidad que tienen en resolver conflictos. Sería bueno que puedan capacitarse en relaciones institucionales y manejo de grupo, porque es una verdadera utopía que tenga éxito su proyecto”.