Cuando todo indicaba que el conflicto de la salud pública en Puerto Madryn se encauzaba hacia una solución, una reunión llevada a cabo el jueves a última hora complicó la situación. El Ministro de Salud, José Manuel Corchuelo Blasco, se volvió a reunir con la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) y con la Unión del Personal Civil de la Nación (UPCN), para comunicarles que no se dictará la conciliación obligatoria, ya que desde la gobernación provincial aseguran que no están dispuestos a mejorar la oferta salarial. Así las cosas, los trabajadores mantienen el paro por tiempo indeterminado y volvieron a manifestarse en el centro de la ciudad. En medio de esta situación, el titular de la cartera sanitaria estuvo en la ciudad ayer por la mañana, donde se reunión con el intendente Ricardo Sastre primero, con los gremios después, y con los concejales en último término.

Desilusión

La reunión del miércoles entre los trabajadores y el equipo del Ministerio de Salud había dejado un saldo positivo, ya que se preveía solucionar el conflicto en el corto plazo, pero por decisión del Gobernador Buzzi y del Ministro Garitano, todo se volvió para atrás: “El miércoles había una buena posibilidad donde todos los compañeros estaban contentos, incluso hemos aplaudido y festejado por una posible reunión para hablar de salario. Pero ayer nos llamó a última hora el Ministro que nos manifestó que no va a dictar la conciliación obligatoria, que no lo va a hacer para mentirnos o no ofrecernos nada y él también manifiesta que es una cuestión del Gobernador y del Ministro Coordinador”, señaló Julio Belascuen, secretario de Organización de ATE Puerto Madryn. Por su parte, Carla Fredes, delegada de UPCN en el hospital Ísola, expresó que “según nos manifestó el Ministro, solo recibe órdenes del señor Garitano y del propio Gobernador, por lo tanto él no podía dictar la conciliación obligatoria porque no tenía una respuesta económica para nosotros”.

Poca diferencia

Parece difícil de entender que el nosocomio madrynense se encuentre paralizado hace 20 días por una diferencia del 1,12 por ciento entre lo que ofrece la provincia y lo que piden los trabajadores, ya que con un incremento salarial del siete por ciento los gremios estaría dispuestos a firmar: “Hoy nos reunimos con el Ministro junto con el Intendente y la promesa del Gobernador es que se va a reunir con el Ministro Coordinador y va a fijar una fecha para reunión por el dinero de salud. Nosotros lo que le manifestamos es que la primera propuesta fue una mentira, nos habían dicho un siete por ciento que nosotros habíamos aceptado, pero en realidad era un 5,88 por una cuestión de índices, porque nos estaban pautando los salarios con los índices de enero. Entonces, lo que le pedimos es actualizar esos índices y que aceptaríamos un siete por ciento y le aclaramos que es desde ese momento que estamos en conflicto, porque fueron ellos los que nos mintieron a nosotros”, explicó Belascuen, al tiempo que los trabajadores cantaban “Corchuelo, decime que se siente, tener parado el hospital”, en la puerta del municipio.

Rumores de renuncia

En medio de esta situación, Corchuelo Blasco confesó a los trabajadores que le manifestó al Gobernador Buzzi que si no se encuentra una rápida solución a este conflicto, éste presentará su renuncia. De todas maneras, el propio “Maní” desmintió un posible alejamiento de su cargo. En lo que respecta a la medida de fuerza, la misma continuará y el lunes los trabajadores se movilizarán hasta la ruta 3: “El paro va a continuar, hasta tanto nos den una fecha y un horario para reunirnos. El sábado vamos a estar con carteles en la carrera que organiza el Colegio de Enfermeros y el lunes iremos a la ruta, donde caminaremos repartiendo panfletos. No la vamos a cortar, vamos a caminar de una rotonda a la otra y en ese corte simbólico será nuestra manera de protestar”, contó el secretario de Organización de ATE.

Distintas miradas

Luego de reunirse con el Intendente Sastre, Corchuelo Blasco mantuvo un encuentro con los concejales de la ciudad y la directora del hospital Ísola, Mónica Villalba, donde se habló acerca del conflicto que vive la salud pública madrynense. Una vez finalizada esa reunión, el titular de la cartera sanitaria fue abordado por los medios de comunicación, y aunque adelantó que no hablaría del conflicto, finalmente lo hizo. Según la opinión de Corchuelo, los trabajadores de la salud recibieron un aumento del 54 por ciento en lo que va del año, si se toma en cuenta las mejoras que introdujo el Convenio Colectivo de Trabajo (CCT): “En estos tres meses de gestión hemos hecho muchas cosas que tienen que ver con el sistema sanitario y sus 6000 trabajadores en cuanto al dinero que se ha aplicado. Este año por ejemplo, los valores de salarios que se han pagado fueron de 1300 millones de pesos, y la proyección que ya armamos es que el valor del salario de nuestro esquema es de unos 2400 millones de pesos. El gobierno provincial instaló que el valor del salario fueron 63 millones de pesos y en el mes de septiembre el Ministerio pagó 153 millones de pesos, es decir que en un año tuvo una diferencia de 90 millones de pesos. El promedio desde el 1º de enero hasta el 31 de diciembre de este año, da que el aumento salarial en el sistema fue de un 54 por ciento. Hay una diferencia de ópticas, la mirada del gobierno es esta, la gran inversión que el gobierno decidió, sumado a un CCT que es un adelanto valiosísimo para el sistema. Y la parte gremial tiene una mirada de que esos valores tienen que ver con lo que fue la paritaria del primer semestre y la inversión que fue entrando en forma paulatina en base al CCT, como que una cosa es la paritaria y otra cosa es el CCT, ellos tienen sus verdades y yo las respeto”, explicó Corchuelo Blasco.

Dialogan pero no arreglan

La actitud del Ministro de Salud ante los micrófonos, tuvo más que ver con la evasión que con hacer frente al conflicto que vive su cartera en la ciudad. Sin embargo, Corchuelo asegura que lo más importante en este momento es que el diálogo nunca se cortó: “Lo más importante es que el diálogo nunca se cortó, aunque no me gustan los paros en el sistema sanitario porque lesionan la salud de la gente. Estamos en una etapa posterior a la conciliación obligatoria, nunca voy a negar la palabra, la realidad es que estamos trabajando y tuvimos dos reuniones el miércoles y el jueves. Cuando hablé con ellos el jueves, les dije que había hablado con el Gobernador y con el Jefe de Gabinete y que necesitábamos tener lunes, martes y miércoles para analizar el tema y resolverlo, pero ellos no estuvieron de acuerdo en levantar la medida. Yo no soy el que decide sobre la economía del salario, yo decido sobre la aplicación de las estructuras en salud, por supuesto que doy mi opinión, quisiera que haya más paz, pero estamos en un punto donde no avanzamos”, manifestó Corchuelo, quien finalizó diciendo que “no tengo certezas sobre qué va a pasar, la realidad es que estaban dispuestos a acatar la conciliación basada en una cifra que estaba fuera del alcance, por lo que no podía haber certezas de ningún número, pero no es que no se hizo porque no quisimos”.