EMPLEADAS SE DEBATEN ENTRE NO DESCUIDAR LA ATENCIÓN AL PACIENTE Y EL PEDIDO SALARIAL

Trabajadores de la Salud, entre el reclamo y la responsabilidad

1El conflicto con los trabajadores del hospital Andrés Ísola se recrudece día a día. Las asambleas diarias en el hall del nosocomio resienten la atención al público, que deben esperar más tiempo de lo normal para conseguir un turno, hacer un trámite o ser atendidos por un profesional. En este contexto, que excede al reclamo gremial en sí, una contradicción envuelve al trabajador de la salud, ya que, por un lado reclama lo que cree que es legítimo, pero por otro sabe que, al mismo tiempo, perjudica a personas que se encuentran en situaciones complicadas. El Diario dialogó con tres trabajadoras de distintos sectores, quienes contaron sus sensaciones internas a la hora de llevar adelante un reclamo.

Contradictorio

Patricia trabaja en el área administrativa del hospital Andrés Ísola y contó qué es lo que sienten al realizar reclamos en un área tan sensible como la salud pública: “Sinceramente te sentís mal, porque nosotros también nos ponemos del otro lado como pacientes y si yo vengo al hospital sea por lo que sea, quiero que me atiendan. Pero desde el otro lado, como trabajadores, tenemos nuestros derechos porque queremos vivir dignamente y queremos ganar bien porque venimos todos los días a trabajar. Es medio contradictorio, estamos como atrapados en el sistema, porque nos debemos a la gente, trabajamos para ellos y quien nos debería resguardar de todo esto, que es el gobierno, realmente no lo hace. Salud es un trabajo insalubre, todos los servicios, hasta en una ventanilla atendemos gente enferma todo el tiempo y eso no se paga. Solo algunos servicios tienen un pago extra por trabajo insalubre”. Por su parte, Gabriela, que se desempeña como médica en el Centro de Atención Primaria de la Salud (CAPS) del barrio San Miguel, señaló que se turnan para poder garantizar una atención mínima: “En el CAPS somos tres y nos dividimos, entonces sabemos que el otro va a estar. Mientras uno se ocupa de pelear por nuestros derechos, el otro está, atiende a la gente. No se va a poder atender a toda la población, nos tenemos que repartir para que no nos pisoteen y al mismo tiempo atender a la gente”.

Especulación

Las trabajadoras madrynenses aseguran que el gobierno provincial sabe la situación a la que se exponen al momento de llevar adelante una asamblea o una medida de fuerza. Con respecto a esta situación, Patricia señaló que “como somos Salud, yo creo que es una base muy importante para ellos con lo que juegan, porque no somos una escuela, no somos un banco, no somos un Tribunal que para, cierra la puerta y se terminó. Nosotros acá estamos jugando con la salud de las personas”. Por su parte, Gabriela contó de qué manera se llevan a cabo las retenciones de servicio en la parte estrictamente médica del sector: “La medida de fuerza consiste en garantizar la atención mínima al paciente, en la urgencia principalmente, en la Guardia también, la internación funciona, en los CAPS siempre va a haber un médico. Lo que es programado, no se atendería”. Graciela, quien se desempeña en el área técnica del hospital, agregó que una medida de fuerza perjudica el propio desempeño de los trabajadores: “Hacer una medida de fuerza nos complica, porque nos encontramos trabajando peor”. Nuevamente Patricia es quien toma la voz cantante a la hora de hablar acerca del grado de responsabilidad de cada uno de los sectores en lo que respecta a la salud pública: “creo que la responsabilidad la tenemos todos, porque desde diferentes funciones, todos tenemos un grado de responsabilidad. Está el que trabaja con una historia clínica, el que trabaja con los turnos, el médico que atiende al paciente, todos tenemos, desde diferentes lugares, una responsabilidad”.

El reclamo

Ahora bien, este diálogo con las trabajadoras del hospital de Puerto Madryn se da en el marco de un estado de asamblea permanente propuesto por los sindicatos, en reclamo a mejoras salariales y el respeto al Convenio Colectivo de Trabajo (CCT). Saliendo un poco de las declaraciones de los referentes gremiales, una trabajadora de base explica en qué se basa el pedido: “El CCT lo que hizo fue dignificar el sueldo, para tener un salario más o menos decente. El Estado tenía una deuda con la gente de Salud que se fue financiando, ya que todavía nos están pagando las cosas que nos debían. Lo que asume la provincia es que esa deuda que tiene con nosotros en realidad es un aumento, pero no es así, esto nos perjudica la jubilación y a pesar de eso sigue insistiendo con lo mismo. La propuesta del Estado sigue siendo un cinco por ciento, nosotros este año tuvimos un 19 en total y con la inflación que hay nos están proponiendo un 24 por ciento para todo el año. Nos parece irrisorio, porque una va al supermercado, compra cuatro cosas y gastas 600 pesos, que es un 10 por ciento de un sueldo básico de un trabajador del hospital”.

El CCT y los cirujanos

Más allá del reclamo salarial propiamente dicho, en todos los sectores de la salud existe un malestar por el acuerdo al que llegaron los cirujanos y el gobierno provincial luego de un año y medio de medida de fuerza. Las trabajadoras aducen que el mismo se realizó por afuera del Convenio Colectivo y piden que se lo respete: “Acá hay una lección encubierta que está dando el gobierno. Si yo hago retención de servicios por un año y medio me premiás con un montón de plata y si no hacés lío no cobrás. Entonces nos impulsan a hacer lío, porque no estamos pidiendo una fortuna, sino algo parecido a la inflación que tenemos este año. Nosotros no estamos enojados con nuestros compañeros cirujanos, culpamos al gobierno de esto, porque nuestros compañeros reclamaron como pueden o como saben y las inequidades las está cometiendo el gobierno”, explicó la trabajadora del área técnica del Ísola. Por su parte, Patricia, administrativa del nosocomio madrynense, explicó que “si arreglan algo, lo tienen que hacer con todos los sectores del hospital, tanto administrativos, cirujanos, enfermeros, porque todos pertenecemos al mismo sistema, desde diferentes lugares, cumpliendo distintas funciones, pero somos todos empleados de Salud Pública. No debería existir esto de arreglar con una parte y con otra no, porque es totalmente irregular y el gobierno debería tenerlo más que claro. Para nosotros es una falta de respeto”, cerró.

Marcharán a Rawson el lunes

Luego de la asamblea realizada por la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) y la Unión del Personal Civil de la Nación (UPCN) en el hospital Ísola, los trabajadores decidieron marchar el lunes a la mañana a la ciudad de Rawson, donde reclamarán por un incremento salarial y respeto del Convenio Colectivo de Trabajo. Además, hoy a la mañana realizarán una sentada en la puerta del hospital, con su correspondiente corte de calle.

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