Cada vez que el ex intendente de Madryn, Carlos Eliceche mete una avanzada política contra el actual alcalde, Ricardo Sastre, la ciudad se incendia, las gaviotas picotean las ballenas hasta sangrarlas, y el viento destroza las bardas enloquecidamente. Aparecen pintadas enchastrosas que van de lo político a lo deportivo en una línea. Señales poco naturales, contingencias largamente sufridas y repudiadas por la ciudadanía.
Ayer fue otro de esos días de furia azuzada por infiltrados de la barra siempre lista que violentaron oficinas públicas y arrasaron contra todo, en otra escalada inadaptada y con huella digital incluía. Porque los empleados municipales se enojan, se extreman, pero no tienen la ´mala leche´ que se avizora en esas oportunidades en que ´el hombre´ se decide a hacer daño.
Quienes lo conocen, saben que es la metodología que más le gusta y que conjuga todos los ímpetus cancheros, aunque la que peor resultado le ha dado.
Después de haber guiado los destinos de la ciudad por ocho años, beneficiado por el capital político que le puso a disposición el “Pelado” Sala, Eliceche sabe bien donde está el ´talón de Aquiles´ de la administración de Madryn: precisamente en los sueldos de los municipales. Por eso se encargó siempre de asegurar la plata para ese compromiso a través de los múltiples negocios públicos, y a mantener una alianza permanente con el gremio, hasta el día de hoy inclusive.
Con esa sencilla fórmula, “El Ganso” pudo hacer política antes y después. Lo demás lo sintetizó en una definición cumplida “esta ciudad se gobierna sola”, y así fue.
De hecho, todo desenlace caminó por cauces propios y casi exclusivos del sector privado.
De su herencia, nadie desconoce que el Municipio además certificó por auditoría externa las importantísimas deudas a proveedores, los pagos de apuro realizados los últimos dos o tres días de su gestión a empresas amigas, la deuda del pavimento endosada, y la emisión de cheques pos datados a 30, 60 y 90 días, incluso muchos de ellos con fecha de emisión enero de 2012, según declaró en su momento el secretario de Hacienda, que debió abrir la puerta de un lugar que ni computadoras andando tenía. Una tarea que “Pepe” Grazini se encargó de agilizar y enjuagar.
Cada vez que aplica un ´correctivo´, Eliceche aprieta ahí, en la caja. Sabe que la fórmula de control a Sastre es el ahogo que Provincia puede hacerle a Madryn (él lo vivió con Das Neves pero tuvo la banca de Nación), y el agite que él puede meter a través de su tropa ´becada´, tal el caso de “Charly” Marcilla que se la pasa pensando cómo cumplir con el mandato de aportar al desastre.
Esto es lo que le “vende” Eliceche al Gobernador Martín Buzzi como ´referente´ del Golfo Nuevo: caos, desencuentro, patoterismo de tablón, oscurantismo.

Cosas del “Pluma”

Si Néstor Kirchner se levantara de su tumba por ejemplo y viera que “El Ganso” entregó a todos en línea para terminar siendo empleado de Buzzi en un puesto del Banco del Chubut, habría completado su álbum de figuritas con la traición más increíble y difícil. No es descabellado pensar que al “Furia” le hubiera contando otro cuento, el de haberse ´infiltrado´ para implosionar a “Tincho” desde adentro. Y es probable que esto sea hasta el momento lo más creíble.
Porque menudo favor le viene haciendo al Gobernador.

El jugador
Primero, renunció a su banca de Diputado Nacional en momentos en que más necesitaba su mano la Nación. Tuvo que sostener una seguidilla de desprolijas renuncias para salirse con la suya. Con ese mal ambiente migró del paraguas que le había tirado Balcarce 50 a los tentadores negocios posibles que veía en Fontana 50, de la mano de Brasil 50. Un número para jugarle, que además dicen coincide con el peaje vigente.
Como ministro Coordinador de Gabinete, lo más resonado de su gestión probablemente fue las intervenciones en el conflicto docente donde el ministro terminó saliendo por una ventana, y el levantamiento policial, donde concentró en Madryn otra vez el ruido fuerte de una ciudad sitiada. Después, la mayor decisión que tomó fue darle un crédito sin avales a la empresa de su amigo el “Cura” Segundo, involucrando a la ministra Dufour y por lo cual terminó imputado en una causa el propio Martín Buzzi.
En el medio operó maliciosamente las Legislativas para enterrar de cabeza al FpV y a su candidato, hasta el momento el chubutense mejor posicionado políticamente que sí había llegado a Nación, y con eso le plantó enfrente a Buzzi a un “K” puro que ´muerde y no suelta´, el ex ministro de Agricultura, Norberto Yauhar.
En contrapartida asoció a Buzzi a otro levantino pero no practicante, el asesor ad honorem vitalicio que se quedó con los negocios del pasado, con lo que directamente le picó el boleto al infierno, y terminó de ponerle cara a todas las macumbas de Das Neves.
La otra manito que le dio “El Ganso” al comodorense, fue negociar toda su estructura del FpV a cambio de su puesto como director del Banco del Chubut, a pesar de las objeciones del Banco Central respecto a su desconocimiento para el puesto. Con su apetencia descomunal, hizo volar por el aire la posibilidad de que el mejor hombre que tenía Buzzi para presidir la entidad, uno que había conseguido el financiamiento externo, y que había dado muestras de idoneidad y lealtad extrema, el licenciado Oscar Antonena, no pudiera asumir básicamente por ´incompatibilidades de parentesco´ por ser Eliceche su primo. Lejos de revisar la oportunidad del conjunto, fue otro que ´carneó´ directa o indirectamente sin miramientos.
Esto le valió un tremendo desgaste en el Legislativo al Gobernador, además de haber tenido otra vez que dar para atrás en una decisión de Estado.
Eliceche entiende el poder como un partido de fútbol: se repliega atrás, juega con la ley del offside contra todos y todas y a veces hasta arregla al banderillero, para luego contraatacar cuando puede y lo dejan. Maneja poco, Madryn, algo del Valle y poco del Interior. No es muy hábil, sino que lo que logra es porque vive entrenando para ´no dejar hacer´. Tiene fondos y tiempo para ello. Pero sabe que debe apurar el tranco.
Después del costo que le significó en imagen pública el vínculo amistoso con parte de la banda imputada por narcotráfico en Madryn, “El Ganso” decidió ahora recuperar un poco de protagonismo y usar a Buzzi como trampolín, sabiendo que probablemente en 2015 deba migrar para el Litoral o donde campee mejor tiempo, tal como vienen las encuestas. Por eso en los últimos actos comenzó a asomarse tibiamente analizando la reacción pública. En una semana ya apareció cuatro veces oficialmente. Las dos primeras incursiones fueron el fin de semana anterior en el centro de Jubilados que regentea su mamá, y en el “Casa Abierta” de Madryn. Luego estuvo en el acto del 9 de Julio en Gaiman y después acompañó a plantar bandera provincial al dasnevista Albaini en Pirámides. En paralelo ayudó a encarajinar Madryn todo lo que pudo.
O sea, la ayuda de Eliceche es clara, juego propio y “pecho frío”, aunque no estaría mal, en agradecimiento a que lo sigue manteniendo en la cancha pese a tanto pifie, que de vez en cuanto le tire algún centro bueno a “Tincho”, no? Habrá que ver…