Ante la medida de fuerza realizada por el sindicato de Luz y Fuerza por 24 horas, el Consejo de Administración de la Cooperativa de Rawson, luego de analizar la situación, decidió que el Secretario, Marcelo Griffiths se pusiera al frente de la recepción administrativa para atender personalmente a los socios que sin saber de la medida de fuerza se acercaron hasta la Cooperativa.
Después de las 10 de la mañana, Griffiths atendió a los usuarios que concurrían a la entidad para solucionar diversos temas y pasada las 12:30 horas se presentó un escribano público que constató la medida de fuerza traducida en la ausencia de personal en líneas de cajas, sector administrativo y mesa de entradas. Una vez que el escribano estaba llegando al servicio eléctrico, certificó que un asociado había concurrido a la guardia sin que le resolvieran el problema, por el cual se acercó y adujo que la respuesta de los operarios de la guardia era no podían ir a su domicilio por estar de paro. El escribano labró un acta para posteriormente tomar medidas al respecto. En tanto, a las 10 horas no había llegado desde la Secretaría de Trabajo ninguna notificación sobre la medida de fuerza, paro que se convocó por la paritaria del segundo semestre y que recién se está discutiendo.
Desde el consejo de administración se valoro la prestación del servicio de agua y cloacas, en tanto que las medidas de fuerza no se condicen con la realidad de la institución, habida cuenta que la importancia del tema debería convocar a muchos actores como lo señalara tiempo atrás el secretario Marcelo Griffiths y no sólo de modo unilateral como lo ha expresado el sindicato de Luz y Fuerza.
Para Griffiths habría que barajar y dar de vuelta y espera que haya una pronta solución porque se trata de una Cooperativa donde los empleados cobran su sueldo, que representa el 92% de la recaudación, gracias a los aportes de los vecinos y donde no hay lugar para caprichosos.
Griffiths valoró el desempeño del consejo de administración y la figura orgánica del sistema cooperativista sostenido por el sentido común de estar con la gente, “el sindicato tuvo durante muchos años representación en los consejos de administración y apoyaron la constitución de las gerencias de los servicios lo cual dio un pésimo resultado llevando casi a la quiebra de la entidad”.
Para Griffiths esto marca una clara línea entre lo que se viene defendiendo, “la individualidad de las instituciones donde en consecuencia la cooperativa sea llevada adelante por cooperativistas, los sindicatos por sindicalistas y las vecinales por vecinalistas”, poniendo como ejemplo que “cada lechón a su teta”.