EL CORRIMIENTO DE LA BARRERA AL RÍO COLORADO FUE EL DETONANTE

El INTA monitorea cambios de consumo de carnes al sur de la barrera sanitaria

7La Estación Experimental del INTA en Trelew se encuentra trabajando en conjunto con otras estaciones de la Patagonia en el seguimiento de las modificaciones que se han registrado en el comercio de carnes luego del corrimiento de la barrera sanitaria al Río Colorado y la necesidad de confeccionar estimaciones en lo que respecta a los escenarios económicos en las distintas provincias Patagónicas. En tal sentido destacan que además de haberse registrado un aumento en el consumo de carnes rojas, se evidencia un cambio cultural que ha hecho que disminuya el consumo de carne ovina, y ha detonado un aumento considerable en el consumo de otras carnes como la porcina y la de aves.
Así lo explicó el Coordinador del área de Ganadería de la Estación Experimental Agropecuaria INTA Chubut, veterinario Andrés La Torraca, quien destacó que hace poco más de un año se produjo un corrimiento de la barrera fitosanitaria que estaba anteriormente ubicada en el Paralelo 42 en la zona de Arrollo Verde, y ahora se encuentra en la zona de Río Colorado. Y “lo que era antes la Patagonia Sur libre de aftosa, hoy en día entró en un programa distinto donde existe una zona que continúa siendo libre sin vacunación –al sur del Paralelo 42- y una zona que ha dejado de vacunarse y que de no mostrar actividad viral y algunas cuestiones específicas sanitarias relacionadas normas de la Organización Internacional de Zoonosis, en poco tiempo pasará a ser toda la Patagonia libre de aftosa y eso modificará la situación a nivel regional”.
El especialista explicó que claramente “al encontrarnos toda la Patagonia como un área sin aftosa, se ha generado un cambio importante porque ha dejado de ingresar carne con hueso y hacienda en pié, desde el norte del país, en las provincias de Río Negro y sur de Neuquén”.
Resaltó que “esto produce que en grandes centros urbanos de consumo, como las ciudades del Alto Valle de Río Negro, Neuquén, Cipolletti, Bariloche y Viedma, hayan dejado de ingresar carnes con hueso del norte, y como consecuencia, que se produjeran modificaciones en la circulación de hacienda, la producción de carne (engordes) y los precios pagados al productor y en la góndola tanto en Patagonia norte como en la Patagonia sur”.

Carnes variadas

Destacó La Torraca que “estas modificaciones, sumadas a otros factores socioeconómicos, produjeron asimismo, cambios en el hábito de consumo de carnes rojas, presentándose otras posibilidades y ofertas como lo es la carne porcina, esto nos deja en una situación claramente distinta que tenemos que relevar”.
El Coordinador indicó que “todavía no lo tenemos cuantificado pero estamos iniciando un trabajo para cuantificar esto y tener una visitón de toda la Patagonia por eso estamos unificando metodologías de trabajo entre técnicos del área de economía en las distintas estaciones experimentales del Inta y estamos trabajando en unificar el método de relevamiento”.
“Lo que podemos decir es que claramente el consumo de carne vacuna claramente viene en crecimiento y empieza a aparecer muy fuertemente en toda la Patagonia –en Río Negro y Neuquén mayor medida que en Chubut- la carne porcina como una carne alternativa en franco crecimiento que se va incrementando en el sistema de producción intensivo”, detalló.
Asimismo sobre la carne ovina dijo que “un poco por las reducciones del stock y la influencia de ciertos cambios culturales que ha habido con el despoblamiento del interior con nuevas generaciones que han venido del interior y se ubicaron en las ciudades, que son los hijos o nietos de los antiguos pobladores, hemos tenido un cambio de hábito en la carne ovina que era muy requerida antes en Trelew, Comodoro Rivadavia, hay ahora una disminución en el consumo regional de la carne ovina”.

Monitoreo

Estos cambios, indicó La Torraca “son los que queremos cuantificar y analizarlos no solo mirando Chubut sino mirando que pasa con este nuevo escenario que nos plantea el corrimiento de la barrera sanitaria al Río Colorado”.
Sostuvo que “en Río Negro por ejemplo hay un frigorífico que está faenando pollos en cantidades muy importantes abasteciendo a toda la Patagonia y e inclusive colocando esta carne de ave en La Pampa y provincia de Buenos Aires también”.
Y la producción porcina “viene en franco crecimiento, hoy podemos ver que prácticamente en todas las carnicerías de Trelew hay un cartel que dice que hay carne de cerdo. Esto hace algunos años no pasaba, era muy difícil de verlo porque el cerdo estaba acotado a un consumo excepcional como para las fiestas”.
Sin embargo “hoy en día no solo hay carnicerías especializadas que solamente venden carne de cerdo en Trelew, lo mismo sucede en Comodoro y en el norte de Santa Cruz, pero además las vemos en carnicerías de supermercados, en carnicerías, etcétera”.
Pero además “vemos sistemas productivos que están incorporando el cerdo nos hace ver que tenemos que mirar esta producción, dar información sobre lo que está pasando con los precios de estas carnes y estamos trabajando no solo con economistas del Inta en estudios de mercado, sino que el tradicional informe de precios de la carne pagados al productor que dábamos para la carne ovina y bovina la estamos ampliando a la carne porcina y caprina” y además “este informe que antes era para Santa Cruz y Chubut lo estamos iniciando en el mes de abril para todas las provincias Patagónicas al sur del Río Colorado”.

Avances tecnológicos

La carne de ave “tiene una particularidad que en realidad son paquetes tecnológicos bastante cerrados y de gran escala que están desarrollados y no necesitan adaptación regional. En general todos los criaderos para tener competitividad en el tema tienen que tener una producción muy grande y a gran escala los sistemas están estandarizados”.
Refirió que “en el caso del cerdo hay emprendimientos grandes pero también existen y hay intención de emprendimientos de mediana y baja escala. Estamos hablando de productores que tienen entre diez, quince, veinte, cincuenta o cien madres y para ellos estamos trabajando con algunas tecnologías más apropiadas y con sistemas que plantean usar recursos locales con producciones bien escalonadas, tecnificando la alimentación que es un tema clave para la producción”.
Porque “no se puede producir cerdos con residuos de verdulerías y demás, producir cerdos hoy implica manejar bien la alimentación que es el 70 % del valor de la carne porcina. Por eso no se puede producir con desechos porque el cerdo no engorda ni crece ni tiene lo que tiene que tener”.
Por último La Torraca mencionó que “por ello producir cerdos es un desafío desde la intensificación de la producción y producir eficientemente. El Valle va a seguir siendo un gran productor de carnes bovina y ovina, y va a aumentar progresivamente en la producción de cerdos. Estas nuevas producciones las vemos aparecer y consolidarse en muchos casos”.

 

ÚLTIMAS NOTICIAS