El Hogar de Día “Nuestros Abuelos”, del Barrio San Miguel, festeja hoy su sexto aniversario, con una fiesta que se extiende desde las 11 hasta las 16 horas, en la sede ubicada en Albarracín Norte 3089. Olga Jones, directora del hogar, explica que “tenemos pensado que vengan del hogar Nuestra Raíces y del Hebras de Plata, van a venir de los Centros de Jubilados, va a haber música. Este año vamos a incluir a las familias, así que estamos con todos los nervios, porque es la primera vez que se va a hacer con la familia, van a venir los hijos, nietos, bisnietos, y ellos van a estar re contentos de que estén las familias con ellos”. La directora del hogar quiso destacar la gran colaboración de las familias de los abuelos, sobre todo en la financiación de la fiesta, ya que “desde la Municipalidad nos mandaron muy pocas cosas, y las familias colaboraron un montón”.

Un lugar de contención

Al Hogar de Día concurren 30 abuelos, no sólo del Bº San Miguel, sino que se acercan de distintos puntos de la ciudad. Los adultos mayores que viven lejos del Hogar, son alcanzados por un vehículo de la Municipalidad, que tiene capacidad para siete personas. Sobre la función social que cumple el hogar, Olga Jones destaca: “Ellos vienen a pasar el día, de lunes a viernes, no solamente para comer, sino que vienen para estar contenidos y no estar solos en la casa. Hay actividades, salidas, pileta, así que la pasan lindo y se hacen amigos, el hogar se hizo para situaciones de bajos recursos, pero tenemos de todo, porque hay abuelos que se sienten solos y se bajonean o se deprimen y después cuesta mucho sacarlos”.
El Hogar “Nuestros Abuelos”, a diferencia de los otros dos, es un Hogar de Día. Funciona de 7 a 19, y los abuelos que viven en el barrio van llegando a la hora que deciden ir, porque no hay un horario de entrada o salida. Ellos toman el desayuno hasta las 10, después viene el almuerzo y las cuatro de la tarde de les da la merienda.

Las actividades

Además de acercarse para desayunar, almorzar y merendar, los adultos mayores que concurren al “Nuestros Abuelos”, tienen un cronograma de actividades. “Los lunes viene el profesor de gimnasia; los martes viene una chica de deporte que los saca a caminar, hace juegos y un poco de gimnasia, porque la idea es que no se queden quietos, que estén siempre en movimiento; los miércoles viene una chica de ecología para hacer reciclado de papeles donde hacen cosas re lindas; los jueves hay yoga; y los viernes hacen pileta en el Patio Grande”. Sin dudas, la estrella de las actividades es el taller de murga que tienen los lunes y miércoles, del que surgió la agrupación “Los Nonos Mugueros”, que cada vez que hay algún evento, le ponen alegría y color con sus bombos y redoblantes.

Las necesidades

Como toda institución de este tipo, las necesidades son moneda corriente a la hora de hablar con las autoridades, y el hogar “Nuestros Abuelos” no es la excepción. El principal problema con el que cuenta es que sólo tiene un baño para los 30 abuelos y abuelas, “son muchos y tienen que esperar por el baño, además de que a las abuelas no les gusta demasiado la idea de compartirlo con los hombres”. Además, el lugar físico ya les está quedando chico, y eso conlleva a que no puedan aceptar adultos mayores que estén en silla de ruedas, ya que no hay espacio suficiente para que puedan moverse.
Hoy, el hogar está cumpliendo su sexto año de vida, y también cumple su sexto año sin arreglos, algo que debería tenerse en cuenta por parte del municipio: “Entramos así al hogar y así quedó. Nunca se pintó, una de las puertas de emergencia no tiene la barra que la abre, por el techo se nos mete muchísima tierra, y cuando llueve entra mucha agua, sobre todo arriba del hogar que tenemos en el medio. El hogar necesita muchos arreglos”, detalla Olga Jones, quien dirige el Hogar desde hace dos años.

Los proyectos

Además de los arreglos necesarios y la construcción de un segundo baño para que los 30 abuelos no tengan que esperar tanto, desde el Hogar de Día tienen un sueño: hacer casitas tuteladas. “Hay muchos abuelos que quieren irse a vivir solos o están un poquito mal con la familia, y queremos hacer como el Hogar que está en el Pujol, donde al lado hay casitas tuteladas y ellos viven solos ahí, pero desde el Hogar se los asiste. Acá al lado no hay nada y es un terreno municipal, así que tenemos pensado construir ahí las casitas tuteladas. Hay que armar el proyecto, pedir el terreno, falta mucho, pero ganas sobran”, cuenta Jones.
Por último, nada mejor que la palabra de uno de los abuelos que disfruta diariamente de la contención que le da el Hogar de Día “Nuestros Abuelos”, que hoy está festejando su sexto año de trabajo con los adultos mayores. Mayores como Norma Saccone, que hace nueve meses que concurre al hogar y dice: “Me cambió totalmente la vida. Yo estaba un poco decaída, deprimida y al entrar aquí enseguida me abrieron los brazos las asistentes, la directora, los abuelos y me encanta conversar con ellos, tomar mate y, sobre todo, divertirme mucho, que es lo que hacemos acá”.