SEÑALAN QUE EN SU MAYORÍA SON EXTRANJEROS QUE TRAEN LA ENFERMEDAD DE SU LUGAR DE ORIGEN

Casi 40 personas se atienden semanalmente por Chagas en el hospital Ísola

Una de las enfermedades que afecta a una buena parte de la población de Puerto Madryn es el llamado Mal de Chagas, aunque paradójicamente, no es una patología que se origina en los entornos urbanos o ciudades, pero poco a poco, debido a la migración con el tiempo ha logrado ingresar a las ciudades de centro y Sudamérica, incluso llegando hasta Estados Unidos donde se estiman que existen 500 mil personas infectadas con esta enfermedad.
La Doctora Liliana Bonelli es cardióloga y responsable de la atención de los enfermos de Chagas en el hospital Andrés Ísola, donde atiende a unos 40 pacientes al mes, al respecto señaló: “En Madryn existe lo que se llama Chagas Urbano, que refiere a que los pacientes a los que nosotros le detectamos Chagas, por un estudio de laboratorio, que son serológicamente positivos, ese Chagas no lo han adquirido acá en la ciudad, o sea que el insecto no los ha picado en la ciudad, sino que lo traen con ellos desde otros lugares que son endémicos. Este Chagas que encontramos en la ciudad, es debido a la migración de esas personas desde lugares endémicos hacia Puerto Madryn. La mayoría de los pacientes que asisten al consultorio, son pacientes de nacionalidad boliviana o hijos de bolivianos. Ellos se preocupan muchos y tienen mucha más conciencia que los argentinos. En Bolivia no está controlado y sigue habiendo mucho Chagas, en Cochabamba, en La Paz, en varios lugares”

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Formas de contagio
El Chagas no tiene forma de contagio a través de aire, como si fuera una gripe, sino que la forma de adquirir esta enfermedad es bastante más compleja, como detalla la doctora Bonelli: “Hay tres formas de contagio: vectorial, que es cuando te pica el insecto; transfusional, que se da a partir de recibir sangre infectada, que eso no debería pasar porque se hacen buenos controles de calidad y con todos los reactores que existen, se ve cada vez menos; otra forma de contagio es el Chagas congénito, en la cual una madre que tiene Chagas se lo puede transmitir al feto a través de la placenta; y la otra forma de adquirir el parásito que produce el Chagas es a través de la vía sanguínea directa, que puede ser por manipular sangre infectada; y también hay una forma menos frecuente, que se ve más en Brasil, es a través de la vía digestiva, pero acá no casi no hay”.
Es necesario aclarar que el Chagas es una enfermedad asintomática, o sea que una persona puede no saber que tiene esta patología si no es a través de la realización de un estudio: “Cuando suele haber algún síntoma de tipo cardiológico como arritmia, insuficiencia cardíaca, fatiga o palpitaciones, suele ser tarde. Así que es bueno que toda persona que viene de las zonas del norte, de los países endémicos, que no sólo es Bolivia, asista al hospital que la vamos a atender con la mejor buena voluntad”, recomienda Bonelli.

El tratamiento, esencial
El famoso dicho “ante cualquier duda, consulte a su médico” es la mejor forma de prevenir o tratar alguna enfermedad. Por eso, desde el hospital Ísola recomiendan que las personas que tengan dudas sobre el Chagas se acerquen los martes para que les realicen los estudios: “Primero se les hace la serología en el hospital, que es muy segura, se les pide las tres reacciones, y si dos son positivas con un determinado valor, el paciente está infectado. A partir de ahí, se les empieza a pedir todos los estudios cardiológicos para ver si tiene afectación cardíaca, porque es ahí donde más patología se produce, y a veces se los manda a un gastroenterólogo para que les haga un estudio de esófago y tubo digestivo. Se los estratifica con diferentes estadios según el riesgo. A partir de esa estratificación se los empieza a hacer el tratamiento cardiológico si es necesario, o se controlan una vez por año si es Chagas crónico de bajo riesgo”. Existe un nuevo tratamiento que, sobre todo, en niños adolescentes es más que efectivo y que puede llevar a negativizar la enfermedad: “También existe el tratamiento etiológico, o sea, se los trata directamente con anti parasitarios, que es algo que lo estoy haciendo muy seguido, porque cada vez hay más pacientes que se enteran y vienen a recibir la medicación que los provee de forma gratuita Nación. Es una medicación que se da por 60 días con un control bastante estricto porque puede producir reacciones adversas, pero no suele ocurrir. Es importante que vengan y que se traten. Sobre todo los chicos desde recién nacidos hasta los 16 años hay que tratarlos, porque el porcentaje de curación es altísimo. En los adultos, todavía no está dando demasiados resultados, pero siempre que se trata, la enfermedad es menos agresiva”.
Por último, la doctora Bonelli cuenta de qué manera se estudia y trata la enfermedad en los casos que el riesgo de contagio sea a través de la placenta: “Con las embarazadas ahora hay un protocolo que indica que a todas las embarazadas hay que pedirles una serología para Chagas con las tres reacciones y la titulación. A partir de eso, si es positiva, una vez que nace el bebé, en el mismo momento de recién nacido, se le hace los estudios y si es positivo ahí, mismo se lo trata con antiparasitarios y el porcentaje de curación es del 100 por ciento”.

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